¿Quiénes hacen los
pronósticos económicos?

A diferencia de la meteorología, en donde el principal pronosticador es un instituto nacional, en la economía hay muchos pronosticadores. El ecosistema de las instituciones que pronostican variables macroeconómicas argentinas es heterogéneo y dinámico: pueden ser fundaciones, empresas chicas o medianas, centros de investigación de grandes bancos nacionales o internacionales. Es un ecosistema formado por unos cincuenta actores, con distinta antigüedad, cantidad de patrocinadores y clientes, objetivos e incluso con distintas áreas de expertise.

El ecosistema de las instituciones que pronostican variables macroeconómicas argentinas es heterogéneo y dinámico.

Un equipo de investigación de la UNSAM hizo un estudio donde describe y caracteriza a estas instituciones. Lo hace de dos formas: por un lado, hizo una serie de entrevistas semi-estructuradas a los protagonistas. Y por otro lado, evalúa qué variables, internas y externas a los pronosticadores, explican los errores de pronósticos que obtuvieron en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central de la República Argentina (BCRA) y de Focus Economics.

Se hicieron 31 entrevistas y, agregando información de mercado, se armó una base de 47 consultoras (35 consultoras privadas, 4 centros de investigación de Bancos, 4 estudios de investigación y 4 Fundaciones) para analizar los factores internos que podrían influir en los pronósticos. En las entrevistas se preguntó por información interna de las instituciones, como la antigüedad (que dio un promedio de 23 años) y el tamaño (que dio un promedio de 10 personas), entre otras. Muchas de las características institucionales no cambiaron sustancialmente en el tiempo. Sí se notó la incorporación de nuevas tecnologías de scrapeo de precios para analizar la inflación y la actividad económica. Y también apareció la búsqueda y generación de indicadores propios, particularmente durante la intervención al INDEC entre 2007 y 2015.

¿Cuáles son los datos? ¿Qué es el REM?

El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) es un seguimiento sistemático de los pronósticos sobre la evolución de las principales variables macroeconómicas de la economía argentina que realizan analistas especializados. El interés del Banco Central de la República Argentina (BCRA) es conocer las expectativas del mercado en variables como inflación, tipo de cambio, crecimiento, tasas de interés para utilizar esta información a la hora de diseñar e implementar la política monetaria. 

El REM se hace desde 2004. En sus primeras publicaciones, la cantidad de participantes era algo menos de 50. Sin embargo, a partir de 2007, con la intervención del INDEC, la muestra se resiente, en 2010 baja a menos de 20 instituciones participantes y en 2012 se suspende. A mediados de 2016 reaparece. Para junio de 2022, hay 47 participantes habilitados: 33 son consultoras y centros de investigación locales o extranjeras y 14 pertenecen al sistema financiero argentino. 

La publicación es mensual y tiene cierto prestigio, toda vez que sus participantes pasan un filtro para ser admitidos. Sin embargo, al ser una encuesta anonimizada, no se puede saber qué consultora hizo qué pronóstico. Así que es un promedio (media/mediana) de los resultados que todas las instituciones pronostican. 

El interés del Banco Central en el REM es conocer las expectativas del mercado en variables clave de la economía para diseñar e implementar la política monetaria.

Como el estudio quería seguir el pronóstico de cada institución en el tiempo, el análisis se complementa con una encuesta internacional llamada Focus Economics. Es una encuesta que releva las expectativas de mercado en diferentes países de América Latina. Para Argentina participan 56 instituciones, aunque la cantidad de participantes varía según el indicador.

Los pronósticos de todas estas instituciones en los dos ámbitos mencionados se analizaron en función de ciertas características, algunas internas de la institución y otras externas relacionadas al contexto. Entre las características internas encontramos: antigüedad, tamaño, origen nacional o extranjero y el tipo de institución, si son una consultora, un banco o un centro de estudios. Se generaron también indicadores sobre las capacidades organizacionales, si los contactos de sus referentes están diversificados o concentrados y la afinidad ideológica de los miembros. En relación a las variables externas relacionadas al contexto, se tomaron en cuenta: la influencia de años electorales, ya sean elecciones legislativas o presidenciales, la existencia de un shock internacional como el de 2008 y 2009, o de 2020, la existencia del cepo (2012-2015 y 2020-2022), el acuerdo con el FMI en el año 2018, si el gobierno es peronista o de Juntos por el Cambio, y la volatilidad cambiaria del tipo de cambio oficial.

Las consultoras realizan informes periódicos que pueden ser diarios, semanales y mensuales para seguir la coyuntura local e internacional. Hacen trabajos de investigación y asesoramiento a empresas, hacedores de política pública y organizaciones de la sociedad civil como cámaras o sindicatos. También hablan con periodistas para informar y para difundir sus servicios, en busca de mejorar su reputación y de nuevos clientes. Muchos de sus fundadores pasaron por la gestión pública, otros son candidatos a pasar en el futuro. La sociedad los escucha atentamente, sin embargo es fundamental preguntarse si tenemos las herramientas para interpretar los pronósticos y si entendemos cuál es el servicio que nos prestan.